Respeten sus progreleyes y no sean contradictorios censurandome.

El Congreso no promulgará ninguna ley con respecto a establecer una religión, ni prohibirá el libre ejercicio de la misma, ni coartará la libertad de expresión ni de la prensa; ni el derecho del pueblo a reunirse pacíficamente y de pedirle al Gobierno resarcimiento por injusticias.
(Primera Enmienda de la Constitución de los EE.UU., ratificada el 15 de diciembre de 1791.)



Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

Articulo 19 de la Declaración Universal de los Derechos humanos, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 10 de Diciembre de 1948 en Paris.



- 1. Toda persona tiene derecho a la libertad de expresión. Este derecho comprende la libertad de opinión y la libertad de recibir o comunicar informaciones o ideas sin que pueda haber ingerencias de autoridades públicas y sin consideración de fronteras.

-2. Se respetan la libertad de los medios de comunicación y su pluralismo.

(Artículo II - 71; Título II concerniente a Libertades del Tratado para el que se establecia una Constitución Europea)

miércoles, 20 de junio de 2012

Imágenes del último mundo (margenes del inframundo)





  Un lugar de pesadilla muy parecido al Infierno. Un barrio como el suyo o como el mío. Típico solar de Sudamérica donde muere la infancia y nace la delincuencia. Así dicen los comunistas. Yo digo que todos mueren y que lo único que nace es el gusano en el cuerpo de la victima...

Necios. Negadores de lo esencial. Ahí están los famosos "pibes chorros", que son como las maras de Centroamérica o los "Latins Kings" de España. Basura humana. Nunca mejor dicho. Si Dios existe, ¿por qué existen estas mierdas? Si estos son hijos de Dios, como dicen los cristianos, bien podría decirse que Dios es un hijo de puta (al menos ese dios falso que se lleva la limosna de los adictos a las sectas protestantes mal llamadas iglesias evangélicas o evangelistas").

Dijimos que son gente de mierda, pero no le dimos ficción ni heavy metal a este asunto tan podrido por el reggaemerdetón, la cumbia y la puta que los parió a los subnormales. Ellos son los que arruinan las flores blancas con su sangre oscura y venenosa; ellos son los que de verdad destruyen el buen nombre de Dios - el verdadero Dios - con sus abominaciones dignas de las cucarachas mas no de los hombres. Enemigos de la civilización quienes se creen libertarios por odiar a la policía cuando roban para comprarse zapatillas de marcas extranjeras. Estos sudacas son los soldados del capitalismo y el Nuevo Orden Mundial, sólo que son tan tarados que se creen todo lo contrario por llevar una puta camisetita con la cara del asesino marxista de Guevara.

  Después de tanto martillo y tanto Martínez y tanta hoz y tanto Martínez de Hoz, viene lo bueno de verdad: un día quería matar a unos drogadictos sin matarlos. ¿Cómo? Imagínense ustedes el crimen perfecto. Les daré un par de renglones para que puedan pensar, mientras yo sigo pensando el fin para esta historia que no tuvo fin ni principio porque es la incierta realidad del eterno devenir...

Imaginen que están vivos: no sean tan idiotas como Zapatero ni tan cobardes como el idiota de John Lennon...

 ¿Imaginaron algo? Imaginen...

  Imagínense lo que me estoy imaginando yo ahora que escribo esto. Bueno, confieso que ya he escrito todo, pero ustedes tiene que seguir leyendo para satisfacer su hambrienta curiosidad...

 Pues bien, me disfracé como un Knight - "caballero" - del klu Klux Klan en plena noche de invierno (los idiotas dicen "night" para darle algo de estilo a su pachanga quemada y hedionda). ¿Cómo hice el disfraz? Tomé una sabana blanca hecha por un indio esclavo de un coreano y le hice un par de agujeros a la altura de los ojos. Me di el gusto ya que venden esas telas a buen precio gracias a la mano de obra esclava proveniente del extranjero. El comerciante amalillo es racista y eso me ayuda a mí como argentino para que pueda armarme mi disfraz xenófobo al más bajo precio. ¡Ya! Me estoy desviando: la cuestión es que me disfracé...

   ¿Fiesta de disfraces? No. Ellos, los rateros de la esquina, me vieron como un espectro de la noche y fueron a esconderse en sus pequeños departamentos. No sabían que yo era su vecino. Lo cierto es que estaban más drogados que de costumbre porque yo me dejé robar adrede para que pudieran comprar basura en cantidades suficientes. Estaban muy asustados. Se arrojaron todos por la ventana. ¿Cuántos eran? La cantidad no importa, importa la calidad. Y ellos no nada valían. Nada que lamentar.

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